Inglaterra, 30 de marzo de 1924. El Domingo de las Madres. Una jornada en la que las criadas vuelven a sus casas para visitar a sus familias. Pero Jane Fairchild es huérfana, y pasa ese día de un modo muy distinto. Se cita con su amante. Graham Swift ha escrito una novela tan concisa como deslumbrante, impregnada de erotismo, pasión y melancolía.