«El capitalismo democrático prevaleció porque demostró ser capaz de imponer el disciplinamiento económico a sus propios ciudadanos. El comu¬nismo se desmoronó porque no pudo hacerlo». ¿Por qué terminó pacíficamente la Guerra Fría? ¿Y por qué la economía neoliberal se extendió por todo el mundo a finales del siglo XX? Fritz Bartel explica que la respuesta a estas preguntas es la misma. La Guerra Fría empezó como una competición entre Gobiernos capitalistas y comunistas por ofrecer a sus ciudadanos una vida mejor. Pero la crisis económica de los años setenta hizo insostenible la promesa a ambos lados del Muro de Berlín. Los mercados ejercieron una presión enorme para que los Gobiernos recortaran sus contratos sociales: en vez de hacer promesas, los líderes políticos se vieron obligados a romperlas. En Occidente, el neoliberalismo le dio a líderes como Ronald Reagan y Margaret Thatcher las herramientas necesarias para cerrar industrias, imponer la austeridad y revertir derechos laborales. En Europa del Este, en cambio, revolucionarios como Lech Walesa en Polonia se resistieron a imponer la disciplina