Esta obra estudia en primer lugar la aparición de los nacionalismos en Europa y el ascenso del soberanismo catalán entre 2012 y 2015. En el texto se analizan las diversas causas que fomentaron ese ascenso: una elaboración intelectual previa, la crisis económica y financiera, el uso político de la historia, y el apoyo oficial al proceso soberanista. En segundo término, este libro intenta una definición actual, inclusiva y abierta de lo que significa ser español. En sucesivos capítulos se argumenta que ser español comprende tres aspectos simultáneamente: compartir una cultura global, compartir los principios y valores de un Estado democrático avanzado, y compartir un espacio para actuar en el mundo.